miércoles, 10 de diciembre de 2008

La vidriera irrespetuosa

Igual que en la vidriera irrespetuosa
De los cambalaches
Se ha mezclao la vida,
E. S. Discépolo
En aquellos días de debate por la 125 me encontré con gente que no soportaría 10 minutos seguidos de La Hora de los Hornos hablándome de el Pino Solanas. Entiendo que en momentos de desesperación uno hace leña hasta de los objetos más entrañables. Pero ¿vivir en un permanente estado de desesperación, no es medio neurótico?
Hace unas semanas estos desesperados difundieron un video en youtube en el que se lo veía a Perón criticar el sistema de jubilación estatal. Son tan desesperados que ni siquiera repararon en que Perón decía que  el saqueo a las cajas de jubilación y pensión, comenzó en ... 1956, pleno gobierno de los desesperados.
Hoy Joaquín, en esta onda cualquier bondi me deja bien para pegarle al gobierno, critica a la Presidenta por no haber hecho ninguna mención a los derechos humanos en Rusia y, como siempre en estos casos, se sugiere que el criterio del gobierno en el tema DDHH es bastante peculiar. En algún momento pensé que iba a hacer alguna mención a la visita de Obiang a Argentina. Pero no, a quien le importa un país africano. Si el lector de LN sólo precisa que alguien le de el pie para darse máquina. Es como la pornografía, uno no se topa por casualidad con una peli porno y se calienta, uno tiene toda la intención de calentarse y va y vé una peli porno.
Las cosas en política internacional funcionan así. El gobierno no fue a Rusia a predicar valores universales. Fue en viaje de negocios. Entiendo que sea cuestionable éticamente y hasta sería aceptable una crítica de alguien con un compromiso probado con los DDHH. Precisamente quien tiene tal compromiso sabe que lo mejor que puede hacer al respecto alguien que detenta el gobierno, es defender y promover los DDHH desde adentro, inclusive enfrentando los intereses internos que haya que enfrentar. El que tiene este compromiso sabe que hay que jugársela, y cuánto, y valora cosas que no vé el que la mira desde afuera.

No hay comentarios.: